El cóccix se encuentra situado en la base de la columna vertebral y, generalmente, está formado por cuatro vértebras que se curvan ligeramente hacia la pelvis. Se articula con el sacro por su primera vértebra, llegando a fusionarse con el tiempo.
Gran parte de las fracturas de cóccix se producen como consecuencia de caídas, en posición de sentado, sobre superfícies duras. Otra causa muy común es en el caso de deportes de contacto o en trabajos pesados.
También en el proceso de parto, durante la fase de expulsión, se puede producir la fractura de cóccix (aunque no es muy frecuente), así como también durante la práctica de ciertos deportes como el ciclismo o el remo, o durante las relaciones sexuales como consecuencia de la fricción producida en la zona. Otra causa muy frecuente son los accidentes de tráfico.
Factores de riesgo:
Existen factores que pueden predisponer a un aumento de la probabilidad de padecer una fractura de cóccix, entre ellos destacan:
- El sexo, siendo más frecuente en mujeres.
- Edad avanzada.
- Osteoporosis.
- Bajos niveles de vitamina D y calcio.
- Patologías óseas congénitas.
- Actividades y deportes de riesgo.
Signos y síntomas:
- Dolor al sentarse o levantarse de una silla.
- Dolor constante en la parte baja de la columna lumbar.
- Aumento del dolor al defecar.
- En ocasiones, algunas mujeres pueden experimentar dolor en la zona durante las relaciones sexuales.
Tratamiento de fisioterapia en la fractura de cóccix
Se recomienda hacer reposo y no sentarse sobre superficies duras. El tratamiento de fisioterapia puede incluir:
- Aplicación de crioterapia.
- Ultrasonidos en la zona afectada.
- Diatermia de onda corta.
- Estiramientos y relajación de la musculatura con el objetivo de facilitar que el cóccix vuelva a su lugar.
- Manipulación manual, que puede ser externa o interna.
- Técnicas de liberación miofascial.
- Una vez la fractura esté consolidada, se enseñarán ejercicios de fortalecimiento de la musculatura.
